PREGUNTAS MÁS FRECUENTES

¿El colecho (dormir con el bebé en la misma cama) es peligroso?

Muchas personas temen que dormir junto al recién nacido pueda ser peligroso. Erróneamente se asoció ésta práctica con la “muerte de cuna”, pero en realidad estadísticamente no hay relación directa.

El colecho es una necesidad para el bebé pues se siente caliente y seguro, pero sobre todo quien más beneficio saca de ésta natural práctica es la madre, quien al tener a su bebé al lado puede descansar y dormir, que es tan necesario para que esté bien y disfrute al máximo su maternidad.

No es recomendable si alguna de las personas con quien duerme el bebé toma algún medicamento para dormir, alguna droga ilegal o toma alcohol pues su estado de sueño no es igual al de una madre y padre que no consumen este tipo de sustancias.

La muerte de cuna está relacionada principalmente con el consumo de tabaco por parte de la madre durante el embarazo o después, así que ¡aléjate del tabaco!

¿El agua de pipa puede hacerme abortar?

No, el agua de pipa es un excelente suero natural y en mi práctica no he visto nunca relación entre tomarla y el aborto.

¿Puedo correr si estoy embarazada?

Si tienes el hábito de correr desde hace algún tiempo, normalmente no hay problema. El problema surge cuando queremos hacer algún ejercicio de alto impacto una vez estando embarazadas.

¿Debo tomar vitaminas prenatales?

Desde la primera visita se explora la calidad de la alimentación de la madre desde antes del embarazo. Se le hacen los ajustes y consejos necesarios para asegurarse que sus primeras fuentes de vitaminas provengan de los alimentos directamente. Hay señales que indican deficiencias nutricionales y por lo tanto se recomiendan multivitamínicos de alta calidad, de origen orgánico. Lo mismo con mujeres que durante el primer trimestre no logran retener nada en el estómago por las náuseas. Con respecto a esto, también se exploran conflictos emocionales que puedan estar de fondo.

¿Tener relaciones sexuales durante el embarazo puede dañar al bebé?

No, de hecho, es aconsejable. El embarazo es un proceso intrínsecamente sexual. Las contracciones uterinas que provoca el orgasmo no son tan fuertes como para provocar una pérdida, pero sí para mantener un estado hormonal que beneficia y prepara a la mujer para su parto, tonifican el útero y… ¡las hace más felices!

Se desaconseja tener relaciones sexuales si hay amenaza de aborto.